Jelica Matkovic nació en Split el 27 de mayo de 1924. Sus padres fueron Josip y Anka Sasunić, ambos de Vrboska de la isla de Hvar. Antes de su nacimiento, la familia vivía en Celje, Eslovenia, donde nacieron tres hijos: Nikomir, Ljubenko y Cveta. Luego llegaron a Split, desde donde se trasladaron a Bolivia por motivos económicos. Allí ya vivían dos hermanos de Anka, uno en Cochabamba y el otro en Oruro. El primero en ir a Bolivia fue Josip con sus hijas, mientras que Anka se quedó en Split con sus hijos. Después de llegar a Bolivia, el padre y Cveta fueron a La Paz, donde abrió una tienda de abarrotes. Jelica fue a Cochabamba para quedarse con familiares de la familia Štambuk/Sasunić. Pasaron un par de años mientras la madre venía de Split a La Paz con sus hijos. Entonces la familia se reunió de nuevo y Jelica se unió a ellos. En La Paz, comenzó a asistir a una escuela católica inglesa ya trabajar en la tienda de su padre. Cuando tenía 18 años, Jelica conoció a un joven llamado José del Castillo. Se casaron el 25 de septiembre de 1948, tras siete años de relación.
Comenzó a escribir para la revista «La Razón». Matković/Castillo tuvo seis hijos: Eliana, Jose, Fernando, Miriam, Ninon y Sergio (cinco de los cuales aún viven). Con el tiempo, la pareja construyó el Motel San Bartolomé en el pueblo de Chulumani (provincia de Sud Yungas) no lejos de La Paz. Jelica se dedicó a arreglar el jardín y las áreas verdes alrededor del motel, por lo que también comenzó a cultivar flores que vendía en La Paz. Ella sobrevivió a su esposo y recientemente celebró su 95 cumpleaños. A finales de los ochenta, su viejo sueño se hizo realidad: visitar Croacia por primera vez después de 76 años. Con sus dos hijos, fue a su Split natal, nadó en el mar Adriático y fue a Vrboska, donde su padre y sus hermanos tenían el Hotel Madeira. Se quedaron en la casa de su madre Anka Sasunić, donde un pariente abrió un aparthotel. Jelica Matković está bendecida con salud y es la orgullosa abuela de diecisiete nietos y doce bisnietos que viven en todo el mundo (en Malasia, EE. UU., España, Noruega y varios países de América del Sur). La comunidad croata en La Paz, con motivo del Día de la Mujer en Bolivia, el 12 de octubre de 2019, entregó un premio a Jelica Matković como ejemplo de la fuerza y nobleza de una inmigrante croata.
Branka Bezić Filipović
Cortesia de Snježana Dedić Concha